Experiencia de lectura y escritura (Carla)

Mis primeras experiencias relacionadas con la lectura y escritura comenzaron en el verano del dos mil cuatro. Entraba a primero básico, por lo que mis abuelos, quienes ejercían la pedagogía, consideraron de suma importancia que aprendiese a leer antes de entrar a la escuela. Y así fue como cada mañana, antes del almuerzo, nos sentábamos el comedor junto a mi abuela a practicar con el libro Silabario. Poco a poco fui conociendo vocales, consonantes y palabras, para luego ir uniéndolas en oraciones. La constante dedicación de parte de mi abuela hizo que tuviese un mayor avance en la lectura, por lo que en primero básico tuve un mayor acercamiento –y facilidad- en cuanto a la lectura y la escritura. Con el paso de los años, si bien mi lectura fue mejorando y podía escribir con mayor fluidez, desde una edad temprana comencé a tener problemas de concentración. Por lo que mi abuelo, consciente de que debía enfocar mi atención a los contenidos del colegio, comenzó a prestarme libro...